Apenas 77 metros sobre el nivel del mar, 600 metros de
longitud, una pendiente del 12% y rampas que rozan el 22% tienen la culpa de la existencia de esta pared
adoquinada en pleno corazón de las Ardenas Flamencas, escenario de infinidad de
batallas históricas, afortunadamente en la actualidad las que se libran por
estos lares son batallas de carácter ciclista. Para ser exactos se encuentra en
Melden perteneciente a Oudenaarde,
localidad donde desde el año pasado podemos presenciar la llegada de una de las
pruebas más bonitas y espectaculares del calendario, el Tour de Flandes, De Ronde, así como su completo museo en
una visita fundamental para los amantes de este deporte. Hablamos naturalmente del
Koppenberg, traducido como montaña de las cabezas.
Encuadrado dentro los diecisiete muros adoquinados de la
ronda flamenca, el Koppenberg se subió por primera vez en el año 1976 y lo hizo
ininterrumpidamente hasta 1987.
