lunes, 12 de agosto de 2013

L'Angliru: El temible coloso de la Vuelta

La búsqueda por parte de Unipublic, empresa organizadora de la Vuelta Ciclista a España, de realzar su carrera para dotarla de una identidad propia buscando las diferencias con las otras dos vueltas grandes por etapas, el Giro de Italia y el Tour de Francia, han llevado a la ronda española todo tipo de innovaciones en recorrido, organización e imagen, siendo una de las más llamativas la aparición del maillot rojo para el líder de la prueba que tuvo lugar en la edición del 2010. Respecto al recorrido, la búsqueda de un coloso de montaña que fuera el santo y seña de la carrera como ocurre con ascensiones tan legendarias como el Mortirolo (a pesar de ser relativamente reciente) en el Giro de Italia o el Alpe d Huez en el Tour era otro de los objetivos de los organizadores de la Vuelta.

A mediados del año 1996, Miguel Prieto, invidente y por aquel entonces director de informática de la Fundación Once, envía a Unipublic la documentación sobre una ascensión sobrehumana en plena cuenca minera asturiana, partiendo de la localidad de La Vega-Riosa. Un camino rural hacia ninguna parte con un asfalto en malas condiciones que hacia poner pie a tierra hasta a los más intrépidos cicloturistas de Mountain Bike. Los técnicos de la carrera española procedieron a examinar con más detalle esta misteriosa subida conocida en un principio erróneamente como La Gamonal y más tarde como el Alto de L’Angliru. Se abría paso a una leyenda, por fin la Vuelta tenía el coloso que después de tantos años se le resistía.
El malogrado José María Jiménez “Chaba” fue uno de los primeros profesionales en ir a conocer personalmente la dureza de aquellas terribles rampas del alto asturiano, invitado por la peña ciclista que lleva su nombre en la localidad de Riosa, el abulense destacaba a los medios de comunicación los brutales desniveles y la posible trascendencia que tendría esta subida en el futuro. La organización ya había encontrado su “Mortirolo” o “Alpe d Huez” particular y el mundo descubriría sus poco mas de 13 km de ascensión y y sus rampas de hasta el 23% (en el tramo conocido como la Cueña de les Cabres) tal día como un 12 de septiembre de 1999.
 .
El día en cuestión, los valientes se enfrentaban a 175 km que separaban León del espectacular Angliru, con unas nubes que no hacía presagiar un bonito día en cuanto a lo meteorológico se refiere, y así fue. Según se acercaban los corredores a la cordillera asturiana la cosa iba poniéndose peor y así lo sufrieron hombres como el aragonés Fernando Escartin que tras una aparatosa caída en el mojado descenso de la Cobertoria, sepultaba sus opciones en esa Vuelta de 1999. La hora de la verdad había llegado, por fin llegaba la subida más esperada en los últimos años en la Vuelta Ciclista a España, quizás desde la primera ascensión a los Lagos de Covadonga no se había generado una expectación parecida. “Bienvenidos al Infierno” rezaba una pintada nada más pasar el cruce que lleva a los primeros metros del temible Angliru. La carrera que ya venía hecha pedazos con anterioridad, se iba fragmentando poco a poco. Míticas escenas como la del alemán y a la postre vencedor de aquella Vuelta Jan Ullrich sufriendo junto al líder en aquella jornada, Abraham Olano han quedado para el recuerdo de nuestra memoria ciclista. El mejor escalador español de la época, el abulense José María Jiménez (el “Pantani spagnolo” como afirmaba el comentarista de la RAI en la retransmisión de aquella etapa para el país transalpino) emergía de entre la niebla superando al ruso Tonkov y entrando en la historia como el primer vencedor de esta cima mítica. Jornada con todos los ingredientes encima de la mesa para calificarla como de tintes épicos, rampas inhumanas, lluvia, niebla….la repercusión mediática del evento se disparaba en aquella tarde ocupando en algunos momentos de la etapa, un 50% de audiencia para televisión española.

Durante los siguientes años su presencia en carrera se fue alternando, con un parón entre 2002 y 2008.No exento de polémica por los famosos empujones que no se ven a través de las cámaras y en pleno proceso de humanización del ciclismo, algunos corredores se han manifestado abiertamente en contra de la inclusión del Angliru en carrera. Grandes figuras de este deporte han inscrito su nombre con letras de oro en esta joven pero ya legendaria subida asturiana. “Chaba” Jiménez (1999) Gilberto Simoni (2000), Roberto Heras (2002), Alberto Contador (2008) y Juanjo Cobo (2011) son los corredores que han conseguido vencer en el coloso riosano. En la edición de la Vuelta 2013, el Angliru será otra vez un importante protagonista al situar la etapa un día antes de terminar la carrera en Madrid.